La historia de Beto en 3 cartas: Un niño que se siente abandonado después del nacimiento de su hermanita.


Ciudad de México a 09 de abril de 2019.
Estimado Beto:
Gracias por escribirme, como sabes, yo me llamo Nalleli y mi trabajo es ayudar a las personas a recuperar el sentido de vivir y a relacionarse sanamente. Por eso pienso que esta carta que me mandas es perfecta porque trata de eso.
Quiero que sepas que me pone muy triste pensar que un pequeño de tu edad está sufriendo, que se siente solo y sin amor, porque el amor es la fuente de la felicidad. Quiero que sepas que te comprendo porque a mi me pasó lo mismo, yo también soy hermana mayor. Cuando nació mi hermanita, yo sentía que mis papás todo se lo daban a ella y no me hacían caso, ya no jugaban conmigo y pensaba que ya no me querían y me sentía abandonada.
Con el tiempo comprendí que esto solo es una etapa y no tiene nada que ver con que tus papás ya no te quieran, lo que pasa es que la bebé necesita todo para poder vivir, una bebé no sabe nada de nada, solo llorar. Si no le dan de comer, agua o abrazo muere. Lo que te toca es ayudar a tus papás a que tu hermanita siga con vida, solo mientras llega a ser fuerte para poder caminar y poder comer solita. Vas a ver que hasta la vas a querer más, porque podrán compartir toda la vida, yo te cuento que ahora mi hermanita es mi mejor amiga y siempre me agradece que yo le haya compartido a mis padres.
Esto que te digo no quiere decir que no sea necesario que les recuerdes a tus padres que tu también necesitas saber que te aman y que eres importante y que los sigues necesitando porque sigues siendo niño. Para resolverlo te propongo dos cosas:
1. Que me des permiso de mandarles una carta por medio de tu profesora, junto con un artículo científico donde explico porque el amor es lo más importante para poder estar bien ¿te late cacahuate?
2. También se me ocurre que te acerques a ellos y les digas: ”papá, mamá necesito saber que me quieren, porque me siento muy solo” y verás como ellos van a estar ahí para ti.

Con estas dos ideas, me despido, anexando la carta para tus papás y el artículo, esperando que te sirvan. Si te parece bien, entregas la carta a tu profesora para que la de a tus papás. Y si deseas continuar con la correspondencia, te dejo mi correo: mariacedillo.mx@gmail.com



Nalleli M. Cedillo Morales.

*El nombre del menor fue cambiado para proteger la confidencialidad del menor.



PEQUEÑO RECADO PARA LA PROFESORA DE BETO
Ciudad de México a 09 de abril de 2019.
Estimada Eulalia*:
Te escribo este pequeño recado solo para comunicarte que a lo mejor Beto* te da una cartita para que se las entregues a sus papás, es una carta que yo les mando para darles algunos tips de crianza, sobre todo porque detecté que tiene riesgo de estar en crisis. Aclaro que de ninguna manera él está mal o presenta un déficit o patología, simplemente debe adaptarse a los cambios naturales del ciclo vital.
Decidí que fuera por medio de nosotras, para no ponerlo en una situación difícil donde pudiera existir el riesgo de que lo regañen por andar contando las cosas de su familia que son muy privadas o para no darle la responsabilidad de cómo sus padres lo crían.
Por ahora es todo, espero que podamos seguir colaborando en el futuro, muchas gracias por considerarme. Te envío muchos saludos.

Nalleli Cedillo.
5570808687

*El nombre fue cambiado para proteger la confidencialidad.








Ciudad de México a 09 de abril de 2019.
Estimados padres de Beto:

Me llamo Nalleli Cedillo y soy psicoterapeuta, hace unas dos semanas recibí una carta de Beto, esto es parte de un ejercicio y pequeño programa para fomentar la salud mental de los pequeños. Decidí escribirles porque en esta carta salió la preocupación de su hijo mayor de que ya no lo quieran igual que antes, Beto ha sentido que no le ponen atención y siente abandono. Considero que esto es totalmente normal y se debe al ajuste familiar relativo al nacimiento de la nueva pequeña.
Por mi parte traté de explicarle que ustedes son padres amorosos y que siempre van a estar con él y que puede acercarse, solo que ahora están ocupados con una bebé que demanda mucho trabajo, pero que eso no significa que no lo quieran.
Quiero decirles que comprendo que ahora estén con muchísima atención en la nena porque sí que los necesita todo el tiempo. Y quiero reconocer el trabajo que hacen al estar criando a dos personitas, una de ellas Beto, super inteligente para su edad y altamente sensible. Por eso pienso que es importante que le hagan saber que lo aman tal como es y todos los días. Para eso les dejo anexo un breve artículo que escribí para una revista que a lo mejor les puede servir.
Les agradezco haber leído mi carta y reitero que les escribo con todo respeto y que estoy para ayudarles en lo que se pueda sin juzgarles.

Muchos saludos.

Nalleli María Cedillo Morales.


Artículo para los papás de Beto.

¿Cómo amar a mi hijo o hija?
Mucho se dice que nadie nace sabiendo ser padre o madre, pero sí que se puede aprender. Hoy se tienen al alcance muchos estudios sobre desarrollo y psicología infantil de los que podemos echar mano para ser los mejores padres que podamos.
De acuerdo con los estudios de la terapia familiar, los componentes del amor prento-filial son: reconocimiento-valoracion, cariño-ternura, sociabilización-normatividad y cuidado-protección. Esto quiere decir que nos toca amar a nuestros hijos tal como son, cuidándolos y enseñándoles las normas sociales.
El reconocimiento implica hacer saber a nuestros hijos que los amamos con su singularidad, con todas sus características y que apreciamos sus cualidades. El amor pleno es amar al otro por ser quien es, sin pedirle que cambie.
Cariño-ternura quiere decir vincularse con emoción y reconocer las necesidades psicológicas de nuestros hijos y hacer algo para cubrirlas, así sabrán que los amamos. Decir te quiero, apapachar, abrazar y acercarnos cuando estén tristes o molestos sin juzgar es amar.
La sociabilización incluye enseñar a nuestros hijos las reglas sociales y el respeto al prójimo. Es importante explicarles donde y cuando se pueden decir o hacer ciertas cosas; hay que explicarles de que temas se puede hablar en público y en privado y con quienes. Esto permitirá a los niños que en el futuro se adapten a una sociedad que exige a sus integrantes seguir cierto orden y evitar dañar a los demás.
Finalmente el cuidado y la protección se refieren a proveer de lo necesario para el sano desarrollo a los hijos. Brindar techo, vestimenta, alimentos, servicios de salud, vacunas, escuela y protección en todo momento, es comunicar a nuestros hijos que los amamos. Enseñarles a comer sano, jugar, descansar, hacer deporte y estudiar es muy importante. Otro aspecto fundamental, es hablar con los niños sobre el autocuidado y los límites con el propio cuerpo, hay que tener esa charla sobre las partes del cuerpo que otras personas no pueden tocar y fomentar la confianza para que no teman decirnos si se llega a dar el abuso sexual.
Para estar bien, es necesario que los niños se sientan y se sepan amados en todo momento, por eso nunca está de más nutrirlos relacionalmente. Decir a tus hijos “Te quiero tal como eres”; “Siempre te voy a apoyar”; “¿Qué necesitas? Estoy para ayudarte”; “Es importante que aprendas a cuidarte”; “Todas las personas son dignas de respeto”; “Puedes confiar en mí”; “Me puedes decir lo que sea, no te voy a regañar, trataré de comprenderte”; entre otras cosas similares es bueno para su salud psicológica.
Bibliografía: Linares, J. (2002) Del abuso y otros desmanes. El maltrato familiar, entre la terapia y el control. Paidós: España.

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